|
Érase una vez un rey que deseaba encontrar la repuesta del por qué de tanta discordia entre mujeres y hombres, ya que el número de divorcios era exorbitante. Después de mucho pensar decidió acudir a un sabio el cual le dio una poción mágica, su efecto se noto enseguida, ahora podía leer los pensamientos; feliz ante su oportunidad, se acercó a una pareja cercana que discutía. Al rato comprendió lo que sucedía, no era un problema de género, sino de egoísmo, nos amamos tanto que ceder un poco incluso ante la persona amada, muchas veces es demasiado.
Autor: Doña Peturra Etiquetas: Doña Peturra
|
0 comentarios:
Publicar un comentario
<< Inicio